Estamos sostenidos en las pruebas siempre
Luego extendió su mano y tomó el cuchillo para inmolar a su hijo. Pero el Ángel del Señor lo llamó desde el cielo: “¡Abraham, Abraham!”. “Aquí estoy”, respondió él. Y el Ángel le dijo: “No pongas tu mano sobre el muchacho ni le hagas ningún daño. Ahora sé que temes a Dios, porque no me has negado ni siquiera a tu hijo único”. (Génesis 22, 10 - 11)
Meditación del texto bíblico:
El Señor probó la fe de Abraham porque él debía ser el padre de una gran nación, el depositario de las grandes promesas. Abraham debió volver a su casa fortalecido y agradecido porque puso toda su confianza en el Señor. Esa confianza lo sostuvo en el momento de la prueba e hizo posible que su fe no decayera ni juzgara o dudara de la palabra de Dios. Y fue premiado.
Una mirada al corazón:
El Señor sale en nuestra ayuda siempre que lo necesitamos; nos envía a sus ángeles para sostenernos en las pruebas y nos libera de todo peligro. En todo momento somos alentados, animados en nuestra fe y confirmados en nuestro camino de entrega. El cielo entero no es ajeno a todo cuanto vivimos, por eso contamos con su ayuda de manera permanente.
Oración a San Miguel, Gabriel y Rafael:
Amados Arcángeles Miguel, Gabriel y Rafael, confío plenamente en que, atentos a todo cuanto vivo, no dejan de enviarme vuestra preciosa ayuda especialmente en los momentos difíciles. Ayúdenme a caminar en fidelidad a todo lo que el Señor quiere de mí, a renunciar cuando es necesario y a poner mi esperanza en Cristo, mi única seguridad y consuelo. Amén.
Termina el día con: Padrenuestro, Avemaría y Gloria. Santos Arcángeles rueguen por nosotros.