La medida del amor
Qué sentido tiene la Palabra de Dios que ordena amar al prójimo como a sí mismo. No existe quien se infrinja daño o dolor a sí mismo si no es por causa de enfermedad. Cada uno busca el bien para sí y la manera de satisfacer sus necesidades y gustos. De manera que cada cual quiere lo mejor para sí. Pues bien, la medida está puesta en lo mejor. Esa es la medida que Dios ordena usar con los prójimos. De esta manera a los hermanos se les debe dar siempre lo mejor de sí mismo para poder amarlos con la misma medida con la que cada cual se ama a sí mismo. Lo mejor de sí significa que se debe dar con generosidad, con magnanimidad, con desprendimiento, buscando el bien en todas las cosas. Amando así es como se obtiene la paz de espíritu y la alegría de saberse primero amado por Dios. Porque quien ama abierta y generosamente está dando toda la riqueza que recibe de Dios.
Pongamos en nuestro amor una medida abundante para que podamos dar mucho, darlo todo.