El Espíritu Santo nos anima a ser en el mundo testigos de la verdad
Ahora, Señor, mira sus amenazas, y permite a tus servidores anunciar tu Palabra con toda libertad: extiende tu mano para que se realicen curaciones, signos y prodigios en el nombre de tu santo servidor Jesús. Cuando terminaron de orar, tembló el lugar donde estaban reunidos; todos quedaron llenos del Espíritu Santo y anunciaban decididamente la Palabra de Dios. (Hechos. 4, 29-31)
Reflexión
Ante las amenazas de las autoridades judías, los apóstoles invocan la ayuda del Espíritu Santo para poder continuar con su misión de ser portadores de la Palabra revelada. Llenos del Espíritu siguen decididamente adelante. Es esta la fuerza que los hace activos y heroicos, que los impulsa más allá de sus propias fuerzas a seguir fieles a su misión.
Examen
¿Puedo confiar, en los momentos difíciles y en las situaciones en las que no veo claro, en la acción del Espíritu Santo como reparadora de mis fuerzas e iluminadora de mi vida?
Intención
Me pongo en manos del Espíritu Santo cada vez que me siento necesitado de sus fuerzas.
Oración
Padre Nuestro, envía la fuerza de tu Espíritu sobre todos tus hijos necesitados de tu amor y misericordia. Acuérdate de nosotros en nuestras dificultades y haznos dóciles a tu santa voluntad para que podamos ser testigos tuyos en el mundo. Por nuestro Señor Jesucristo. Amén.
Padrenuestro, Avemaría y Gloria.