El Espíritu Santo permanece en nosotros
La mano del Señor los acompañaba y muchos creyeron y se convirtieron. Al enterarse de esto, la Iglesia de Jerusalén envió a Bernabé a Antioquia. Cuando llegó y vio la gracia que Dios les había concedido, él se alegró mucho y exhortaba a todos a permanecer fieles al Señor con un corazón firme. (Hechos 11, 21-23)
Reflexión
Así como los primeros evangelizadores eran constantemente conducidos “de la mano del Señor”, también nosotros, por la gracia que recibimos del Bautismo, somos llevados por la mano del Espíritu que permanece en nosotros para que demos testimonio de su obrar en el mundo.
Examen
¿Experimento la cercanía del Señor en mi vida y en mi corazón?
Intención
Que el Amor de Dios permanezca en cada uno de nosotros, por medio de nuestra entrega generosa y confiada.
Oración
Padre Nuestro, danos la gracia que nos santifica y nos hace conocedores de la abundancia de tu amor para que podamos permanecer unidos a ti todos los días de nuestra vida. Por nuestro Señor Jesucristo. Amén.
Padrenuestro, Avemaría y Gloria.
