Intención:
Por los que necesitan ser consolados, por los que se sienten abandonados e incomprendidos, por los atribulados.
Padre Eterno, te ruego y te ofrezco mi pequeño corazón por todos mis hermanos, en especial por aquellos que más sufren de soledad y de todos los dolores del corazón y del espíritu. En virtud de los padecimientos de tu Hijo Jesucristo te pido que les lleves el consuelo y la paz.
Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.
(Padrenuestro, Avemaría, Gloria)