(Para rezar cada día)

Dios Eterno, por los Méritos inefables de tu Hijo Jesucristo, por su Amor y los Padecimientos que sufrió durante su Vida mortal, especialmente durante su cruenta Pasión, yo te ofrezco mi pequeña vida, unida al Corazón Inmaculado de María, por la salvación de todos mis hermanos, especialmente por los que no te conocen y por los que no te aman.

Intención:

Por la salvación de todas las almas que no conocen el Nombre de Dios.

Padre Eterno, te ruego en este día, en virtud de los dolores sufridos por Cristo Jesús durante su Pasión, especialmente por la Agonía en el huerto y cada una de las gotas de su Sudor de Sangre, por todas las almas de aquellos que te desconocen, por aquellos que te niegan y niegan tu Santísimo Nombre, para que por la Gracia que salva y santifica reciban tu perdón y la paz.

Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.

(Padrenuestro, Avemaría, Gloria)

Intención:

Por la conversión de todos los que buscan otros dioses y no reconocen al Único y Eterno Dios.

Padre Eterno, por los méritos y sufrimientos de tu Hijo Unigénito y en virtud del gran amor que tienes por todos los hombres, criaturas tuyas, yo me ofrezco a Ti y te pido que derrames tu Amor y Benevolencia sobre todas las almas que te han abandonado porque buscan a otros dioses fuera de Ti. No mires sus pecados e idolatrías sino el amor de los que te quieren.

Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.

(Padrenuestro, Avemaría, Gloria)

Intención:

Por la salvación de los que, habiendo creído, se han apartado de su fe para seguir sus propios caminos.

Padre Eterno, te ofrezco mi pequeña vida y la pongo en tus manos y, unida a los Corazones de Jesús y de María, te ruego por todas las almas de los que han creído en Ti, pero se han alejado perdiendo tu Amor y tu Gracia.

Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.

(Padrenuestro, Avemaría, Gloria)

Intención:

Por todas las almas que desesperan sin poner su confianza en las Manos de Dios.

Padre Eterno, te ruego por todas las almas que no confían, que no se entregan, que vacilan. Toma mi pequeña ofrenda de hoy y por los Méritos inefables de
Tu Hijo Jesucristo, por los dolores y padecimientos de su Pasión, te confío mi alma y la de todos mis hermanos para que, lejos de toda duda, angustia o desesperación podamos alcanzar de Ti el Perdón y la Salvación.

Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.

(Padrenuestro, Avemaría, Gloria)

Intención:

Por todas las almas que buscan a Dios pero yerran el camino, para que dirijan sus pasos hacia Dios.

Padre Eterno, yo te ofrezco en este quinto día mi pequeño corazón unido a los Sagrados Corazones, y te pido por todos aquellos que con sinceridad te buscan pero que van por caminos diversos a los que nos has enseñado, para que vuelvan sus pasos hacia Ti y obtengan de Ti toda gracia y el Perdón de todos los pecados.

Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.

(Padrenuestro, Avemaría, Gloria)

Intención:

Por los que necesitan ser consolados, por los que se sienten abandonados e incomprendidos, por los atribulados.

Padre Eterno, te ruego y te ofrezco mi pequeño corazón por todos mis hermanos, en especial por aquellos que más sufren de soledad y de todos los dolores del corazón y del espíritu. En virtud de los padecimientos de tu Hijo Jesucristo te pido que les lleves el consuelo y la paz.

Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.

(Padrenuestro, Avemaría, Gloria)

Intención:

Por las almas de los justos para que perseveren en su camino a Dios dando testimonio del Obrar Divino en sus corazones.

Padre Eterno, te ofrezco el Corazón de Jesús atravesado por la Lanza y el Corazón de María por todas las almas de los que te aman y quieren vivir conforme a tu Divina Voluntad para que, guiadas por la Luz de tu Espíritu, perseveren hasta el día en que sean llamadas a tu Presencia.

Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.

(Padrenuestro, Avemaría, Gloria)

Intención:

Por todos aquellos que necesitan ser perdonados, alentados y consolados en los caminos de la vida; por aquellos que van sin rumbo porque no saben qué hacer.

Padre Eterno, te pido en este día octavo por todas las almas de los que no encuentran rumbo ni sentido a sus vidas para que, en virtud de los padecimientos y del infinito Amor de nuestro Salvador, sean consolados por Ti y guiados hacia Ti.

Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.

(Padrenuestro, Avemaría, Gloria)

Intención:

Por los que creen en Dios y practican sus enseñanzas, para que el Espíritu de Dios los conduzca hacia una entrega mayor; por su santificación y la salvación de todas las almas.

Padre Eterno, te pido en este día, último de la Novena, por todos aquellos hermanos míos que tratan de vivir conforme tu Voluntad. Que tu Amor, manifestado en tu Hijo Jesucristo, los ayude a perseverar, a elevarse en el espíritu y a transformar sus corazones de manera de llegar a ser colaboradores eficientes en la Causa de la Redención de todas las almas. No tomes en cuenta nuestros pecados, llévanos a conocer el infinito Amor que nos tienes.

Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.

(Padrenuestro. Avemaría. Gloria)